jueves, 13 de febrero de 2014

La valentia de la escucha del espíritu.

Hace ya casi un par de años mis pasos en la vida y en el Aikido se cruzaron con una persona (y con su familia) que fue capaz de hacer algo que no es habitual o mejor dicho que es de raro casi extraordinario.

Para no generar misterios innecesarios comenzaré por ponerle nombre: Joan Rubio.

A Joan ya lo conocia, ¡pero no sabia quien era! Coincidimos en una exibicion hace años en Barcelona, aunque ni nos recordábamos ni nos reconocíamos.

Cuando por circunstancias personales mi residencia se traslada a Barcelona (de nuevo), una de mis preocupaciones es encontrar un lugar de práctica y estudio del Aikido para mi y para mi esposa.

Es en ese momento cuando me encuentro con Joan a la vez que él se encuentra con mi maestro Luis Mochon.

Joan nos acoge sin reticencias a los tres granadinos que acabamos de aterrizar en Barcelona. Y rapidamente reconocemos en él a un amigo y a un gran budoka. Con experiencia en el karate y el kendo, además de 25 años en el Aikido, enseñando con gran éxito en muy diversos

Es en esos tiempos cuando Joan se da cuenta de algo muy duro y muy bello a la vez: habia encontrado una via en el Aikido que llevaba buscando desde hace mucho tiempo, el Aikido de Endo sensei, y un maestro que le conectaba de forma directa con esa idea: nuestro maestro Luis Mochon.

Y aqui está el paso complicado. Aqui esta la valentía.

Joan decide abandonar todo lo conocido, vaciarse de prejuicios y abraza la Endo-Way, con todas las consecuencias, con muchps disgustos y frustaciones, ero tambien con mucha ilusion. Por supuesto sería injusto dejar de nombrar a su mujer, Montse, quien le apoyó y le animó tanto en este sacrificio como en la espezanza de un nuevo horizonte y el encuentro con el arte marcial que tanto anelaba encontrar.

Ahora hace un año de esta decision. Muchas cosas han pasado. Un nuevo club, una nueva asociacion, nuevos amigos y nuevos alumnos. Muchos escenarios y emociones nuevas.
Pero sobre todo una nueva familia.

Un valiente. Un amigo. Un compañero.

1 comentario:

  1. En primer lugar, quiero agradecerte de corazón tus palabras ...

    Para mi y bajo mi punto de vista, el concepto de BUDO adquiere un significado que podría estar representado por varios adjetivos: superación, aprendizaje, escucha, humildad, compromiso y determinación...

    Sin menospreciar a nadie y agradeciendo a todas las personas que se han cruzado en mi camino a lo largo de los años que llevo de práctica, no había sentido este concepto de forma tan INTEGRA hasta que conocí la familia MUSUBI y la ENDO WAY con todo lo que le rodea que no es poco....

    Todo es importante, los buenos y no tan buenos momentos que he pasado y paso durante mi práctica diaria; gracias a ello creo que valoro mucho más el tesoro que 'he descubierto'...

    Por último decirte que es privilegio tenerte como amigo, compañero y hermano en este viaje del que queda mucho por hacer...

    Joan

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